Semifinal de la Davids. Yo estuve allí

Este fin de semana mis padres me invitaron a la Copa Davids, que se celebró en la plaza de toros de las ventas entre los días 19 y 21 de Septiembre.

Mi primer dilema surgió al comprar las entradas. La dicotomía sol-sombra me ha perseguido desde el día que compré las entradas por teléfono en el Corte Inglés hasta el último día de dicha eliminatoria de semi-finales entre España y Estados Unidos.

Como podeis ver en la foto compré los abonos justo en medio de la pista (tendido 5, de sol por cierto) y a una altura perfecta... sobre todo si la temperatura hubiera sido algo más lógica para las fechas del calendario. El viernes no pude ir al tenis, pero mis padres y mi mujer a-lu-ci-na-ron con el calor que hacía durante el partido entre Nadal y Querrey en el que se pasaron los 32º de temperatura y que -por cierto-ganó el manacorí y número 1 del mundo por 3-1, colocando la primera piedra para el pase a la final.

Después de dicho partido jugó Ferrer con Roddick. Típico partido de Ferrer... con golpes espectaculares y momentos en los que sale del partido por completo y parece un juvenil acobardado, pero que llevado en volandas por el público que abarrotó el coso taurino de las Ventas (más de 21.000 espectadores) terminó por resolver en 5 sets.

El sábado un poquito mejor de temperatura (aproximadamente 28º) y algo más frío el tema en las gradas e incluso en "la arena". El partido de dobles que jugaron Verdasco y Feliciano López contra Brian y Fish estuvo bien, pero los españoles terminaron por doblar la rodilla ante el empuje de Brian (que no echó de menos a su hermano con quien juega habitualmente con el que comparte el número 1 del mundo en la modalidad de dobles). Aun así a punto estuvieron de dejar cerrada la eliminatoria el sábado.

Ya por fin hoy tocaba cerrar el asunto. Para bien o para mal.

Para empezar la jornada, nubes. Caras de alegria entre mis padres y yo. Un día nublado que nos permitirá disfrutar de la última jornada de tenis sin tener que morirnos de calor. Parecía que no era calor precisamente lo que íbamos a pasar, porque cuando salimos de casa una hora antes del primer partido (se celebraba a las 12 del mediodía) estaba diluviando en Madrid.

Llegamos a las Ventas y seguía lloviendo. Temimos por la celebración de ésta última jornada. Por los pasillos de la plaza de toros convertida en cancha de tenis se escuchaba de todo y yo, que soy un tecnológico me evadía de los rumores para agarrarme al siempre todopoderoso internet. A través del teléfono comprobé como el Marca decía que definitivamente el partido se aplazaba hasta las 4 de la tarde. Eran las 12.30.

Volvimos en metro a casa, pero cuando estábamos saliendo... llamada para avisarme que habían retirado la lona que cubría la arena y se estaban preparando para jugar... joderrrr!!! Que cabrones los del Marca. Media vuelta en el metro y a toda carrera para allá

El partido fue la bomba, y Nadal pasó por encima de Roddick como una apisonadora (rosco en el segundo set incluído). Le liquidó 3-0 y eliminatoria resuelta... y es que las cosas son más fáciles cuando se tiene a Nadal en tu equipo. Que manera de correr, de luchar, de pegar a la pelota... el público loco terminó por desquiciar al americano, que terminó haciendo un show tipo Djokovic y completamente fuera del partido... un partido que no hubiera conseguido ganar jamás, porque el sol, las nubes y 21.000 personas estaban apoyando al jugador manacorí como si les fuera la vida en ello.

Ahora nos espera Argentina en la final (se jugará en Noviembre en su casa) después de haber ganado a Rusia en la otra semi-final.

Si Nadal participa yo estoy tranquilo