Algunos sabréis que estuve la semana pasada en París en un curso... y que como buen observador que soy me di cuenta del extraño mundillo que rodea al gremio de los taxis en la capital francesa. Para empezar me llamó la atención que no tienen una imagen común. Ni son blancos con la raya trasversal en rojo como en Madrid, ni negros con la puerta amarilla como en Barcelona, ni nada parecido. Simplemente tienen en el techo del coche un cartelito con la palabra "Taxi" inscrito en él.
Además los taxistas parisinos -bastante impertinentes, por cierto- tienen un concepto bastante curioso de lo que es París y lo que es "outside París"... de modo que por poner un ejemplo no te vale darle la dirección a dónde deseas ir, sino que encima tienes que especificarle si está en el núcleo urbano o a las afueras, cuando lo más normal es que no lo sepas. Y alguno nos dijo que nos saliéramos porque el destino no estaba en el centro... hay que joderse!
Pero no quería hablaros sólo de este par de detalles, sino de un nuevo concepto de taxi ecológico que ví allí. Supongo que una empresa pide subvención al Ministerio de Fomento de turno (o el que toque) para que les aporte unos Euros a cambio de que toda su flota sea de coches híbridos, con el consiguiente ahorro de combustible y por supuesto las ventajas que supone para el medio ambiente.
Pero como modelo de negocio no tiene mucho sentido. Es cierto que (démoslo por supuesto) el Gobierno subvencionará una parte de la inversión en estos coches híbridos... pero aparte de eso, a la gente le da igual que tu coche sea "verde", amarillo o marrón mierda. La gente quiere levantar la mano y que un taxi frene para llevarle lo antes posible a su destino, porque vamos siempre con prisa.
¿Acaso os imagináis la escena de un sábado por la noche -que no hay un taxi libre en la calle- y cuando te viene un taxi no ecológico lo rechazas por tu concienciación con el medio ambiente?
Yo no lo veo, la verdad.
Además los taxistas parisinos -bastante impertinentes, por cierto- tienen un concepto bastante curioso de lo que es París y lo que es "outside París"... de modo que por poner un ejemplo no te vale darle la dirección a dónde deseas ir, sino que encima tienes que especificarle si está en el núcleo urbano o a las afueras, cuando lo más normal es que no lo sepas. Y alguno nos dijo que nos saliéramos porque el destino no estaba en el centro... hay que joderse!
Pero no quería hablaros sólo de este par de detalles, sino de un nuevo concepto de taxi ecológico que ví allí. Supongo que una empresa pide subvención al Ministerio de Fomento de turno (o el que toque) para que les aporte unos Euros a cambio de que toda su flota sea de coches híbridos, con el consiguiente ahorro de combustible y por supuesto las ventajas que supone para el medio ambiente.
Pero como modelo de negocio no tiene mucho sentido. Es cierto que (démoslo por supuesto) el Gobierno subvencionará una parte de la inversión en estos coches híbridos... pero aparte de eso, a la gente le da igual que tu coche sea "verde", amarillo o marrón mierda. La gente quiere levantar la mano y que un taxi frene para llevarle lo antes posible a su destino, porque vamos siempre con prisa.
¿Acaso os imagináis la escena de un sábado por la noche -que no hay un taxi libre en la calle- y cuando te viene un taxi no ecológico lo rechazas por tu concienciación con el medio ambiente?
Yo no lo veo, la verdad.
2 comentarios:
yo tampoco, pero están mucho mas sensibilizados con el tema que los españoles. No sabes lo que me ha puchado a mi un francés por ir a currar en mi coche en vez de en tren (con el cual perdería 45-50 min mas diarios)
de todos modos esto confirma los rumores: "hablar es gratis"... o como decía aquel, que facil es ser marica con el culo de otro
salu2
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