De vacaciones y sin teléfono (forzosamente, por cierto) gracias a Vodafone

Me encuentro desde hace una semanaa en Cóbreces (Cantabria), un apacible pueblo situado entre Comillas y Santillana del Mar... disfrutando de mi familia y viendo como mi familia disfruta con nosotros y -especialmente- con los niños.

Hasta aquí podríamos considerarlo un verano normal. Buen tiempo, tranquilidad, familia, amigos... todo genial. Todo iba bien hasta que Vodafone decidió que no debía hablar por teléfono...que iba a forzarme al más absoluto aislamiento y es que desde ayer a las 4 de la tarde, no puedo realizar ni recibir llamadas. Es curioso, porque las llamadas entran, pero yo no oigo nada. Y no es cosa del teléfono. He probado con otros dos móviles que tengo aquí y nada... y a mi madre y a mi mujer les ocurre lo mismo.

Después de aproximadamente 24 horas, todo sigue igual... mis amigos me llaman y yo tengo que decirles (sin escucharles a ellos) que me envíen un sms (que curiosamente si llegan) porque no oigo nada. Y me frustra y me cabrea que esto pueda ocurrir en pleno S.XXI. No lo entiendo y me parece suficiente para cambiarme de operadora móvil.

Si ya lo tenía en la cabeza, me parece que mis antiguos clientes, y amigos de Vodafone van a perder un buen puñado de líneas... por ineptos