Este verano hemos visto un montón de anuncios con altas dosis de frescura. La mayoría de ellos, de cervezas. Los ya clásicos de todos los veranos de Estrella Damm o Cruzcampo más alguno que otro que ya comenté en El blog del Marketing (aquí y aquí). Pero hace unos días ví en la tele un spot de Mc Donalds en un momento del año en el que lo que suele ser común es la operación bikini o -para los que están disfrutando de sus vacaciones- el chiringuito y la cerveza.
Y la verdad es que me sorprenden un par de cosas de dicho spot.
La primera de ellas es que Mc Donalds se centre en un producto, en vez de en su "portfolio" de menús y hamburguesas, lo que me da a entender que quizás las ventas de su buque insignia (el Big Mac) pueden estar siendo afectadas por las constantes probaturas que tanto Mc Donalds como Burger King sacan al mercado cada dos por tres y que finalmente lo que hacen es incrementar ventas gracias a un perfil de cliente poco fiel. Quiero decir con esto que si todos los que entran en Mc Donalds tienen claro que su hamburguesa favorita es la Big Mac (o cualquier otra), tendrán esa referencia en la cabeza... mientras que si constantemente le estás tentando a probar otras, su fidelidad puede estar resquebrajándose (si bien es cierto que este spot parece precisamente reforzar la presencia de su buque insignia)
Me sorprende también que aprovechen el verano no solo para emitir el spot, sino para encima dotarle de un cierto tufillo internacional. No creo que el verano sea el momento en que más se acuda a un restaurante de comida rápida, si bien podría ser una referencia para aquellos que viajan a otros países (aunque con la crisis, no sé yo), porque saben que allá donde vayan, hay un Big Mac esperándoles.
Sea como fuere, aquí os dejo el spot... que independientemente de estas consideraciones, creo que está bastante bien.
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