Recuerdo perfectamente que un
buen amigo decía que en la relación comercial entre una aseguradora y su
asegurado tan sólo había un momento crítico para conseguir su fidelización e
incluso –diría yo- su posible prescripción a familiares y amigos.
Ese momento crítico en el que el
asegurado espera que su aseguradora esté a la altura y le corresponda como
espera y en justa contraprestación a los 12 meses de pago que el asegurado ha
realizado es –por mucho que nos cueste creerlo- el momento del siniestro.
Es paradójico saber que
prácticamente da igual el tono o la frecuencia de comunicación que la
aseguradora tiene con su cliente. Hay compañías con un tono más cercano y otras
con un tono más profesional. Las hay especializadas en targets de consumidores
y vemos como se posicionan en búsqueda de los más jóvenes, los más prudentes o
los mayores.
Pero da igual lo que hagan. Da
igual el número de emails que envíen o el número (y la cercanía) con la que
traten a sus asegurados. La realidad es que podrían ahorrarse mucho dinero
sencillamente cumpliendo en el momento de la verdad (los americanos dirían
aquello del “MoT”, o Moment of true”). Es parecido al penalti en el último
minuto, o al tiro libre con el partido de baloncesto empatado y fuera de
tiempo. No caben excusas. Sólo hay dos opciones y son radicalmente opuestas.
Éxito o fracaso.
Si en el momento del siniestro la
compañía de seguros cumple con creces, se habrá ganado la confianza eterna de
su asegurado. Por un motivo evidente. Porque el asegurado lleva pagando
religiosamente la cuota de su seguro para que cuando ocurra, todo salga bien, o
al menos acorde con lo que ha contratado en su póliza
Y para que no haya sustos, lo
mejor es asegurarte con los buenos. Con los que saben lo que hacen y demuestran
en ese “último minuto” que saben estar a la altura. Mapfre es una aseguradora que da confianza
basada en hechos y experiencias de sus millones de asegurados. Si eres
inteligente y quieres tener tu coche asegurado, deberías comprobar lo que
Mapfre tiene para ti… porque luego puedes arrepentirte.
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