Recuerdo la primera vez que fuí al Museo de Cera de Madrid que está en la plaza de Colón. Sería uno de mis primeros años en Madrid, con 18 o 19 años, y fue en un fin de semana en que vinieron mis padres. Incluímos la visita al Museo de Cera como una de las actividades turísticas del fin de semana (ahora me confirmo que fue un error, aunque digan aquello de que el saber no ocupa lugar).
Salvo alguna excepción (que honestamente ni recuerdo), me sorprendió ver la poca similitud entre los personajes caricaturados y la realidad. Quizás la técnica sea muy compleja y sea imposible que se asemejen más, pero salí del museo sintiendo que aquello era un timo o directamente una mierda de museo.
Y ya. Lo había sacado de mi mente hasta que hace unos días saltó la noticia (muy relevante como podréis ver ahora) de que la nueva familia Real y en especial la Infanta Leonor ya tiene su figura en el Museo de Cera de Madrid. No tengo en mente la cara de la infanta, pero después de ver la figura de cera que acaban de hacerle, me he preocupado por buscarlo en Internet y esas sensaciones olvidadas sobre el Museo de Cera han vuelto con más fuerza a mi mente.
Si no lo entiendes, voy a dejarte algunos ejemplos para que lo juzques por ti mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario