El sistema es muy sencillo. Has de registrarte en Car2go y además que te activen el usuario, y a partir de ahí lo gestionas todo con la aplicación que has de instalar en tu smartphone.
Lo primero es buscar un coche cercano a donde estés. Para ello simplemente abres la aplicación, esta te geolocaliza y te muestra en un mapa los coches Car2go disponibles para tu uso. Haciendo click en cada vehículo te viene la calle exacta en la que se encuentra, su matrícula, nivel de carga (ya que son eléctricos) y una breve descripción del nivel de limpieza interior y exterior.
Una vez seleccionas el que mejor te venga, puedes hacer una pre-reserva, y el coche será para ti en los próximos 30 minutos (el tiempo que necesites para terminar tus gestiones y dirigirte hacia el mismo), o directamente acercarte hasta el vehículo (Smart) y hacer un click en "comenzar el alquiler" y verás como los intermitentes del coche se iluminan y el coche se abre para ti. La verdad es que parece magia que abras un coche que no es tuyo simplemente apretando la pantalla de tu móvil.
Te metes dentro del bi-plaza y a partir de ese momento todo es más sencillo de lo que crees. Hay una pantalla táctil en el frontal del coche que te va indicando paso a paso lo que tienes que hacer. Es imposible confundirte, así que en cuanto terminas de colocar los espejos, giras la llave y comienza tu periodo de alquiler y tu experiencia Car2go.
El coche es eléctrico y automático, pero no has de preocuparte del nivel de carga, ya que siempre encontrarás un vehículo con nivel suficiente de batería (pero igualmente, puedes asegurarte antes de meterte en uno mirándolo en la aplicación). Al ser un Smart aparcarlo es sencillo, y en el precio (Registro inicial de 19€ y a partir de ahí 0,19€/min) está todo incluído, así que lo puedes dejar en zonas verdes o azules en el radio interior de la M30 sin coste alguno. Da igual donde lo aparques mientras esté dentro de la M30 y sea en un sitio legal (huelga decir que si lo dejas en un "carga y descarga" tendrás problemas)
Al salir del coche también te avisa de que vigiles apagar las luces, indicar si el estado del coche es bueno y una vez cierras, verás un contador con 15 segundos, que es lo que tarda en cerrarse el coche para que el próximo usuario pueda beneficiarse de la comodidad de Car2go. La única pega que le veo (en mi caso, que vivo en Arturo Soria, justo al lado de la M30, pero fuera de la misma) es que sólo puedes dejarlo aparcado dentro de la principal arteria de circunvalación madrileña, lo que implica que le podré dar uso a diario desde la oficina, pero en caso contrario, he de dar un paseo de 10 o 15 minutos para adentrarme en la zona en la que poder disfrutar de Car2go.
Sea como fuere, una experiencia muy positiva por su sencillez de uso y por la flota -cada vez mayor- de estos coches dentro de la ciudad de Madrid.
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