No hay empresa, grande mediana o pequeña que no tenga un programa de contabilidad para consolidar el estado de sus cuentas financieras. En las grandes corporaciones suelen tener paquetes informáticos que les permiten gestionar las nóminas, las entradas y salidas de mercancías, la información transaccional, los precios y stock final y casi cualquier cosa que se os ocurra.
Pero, ¿Qué pasa con los autónomos y las pequeñas y medianas empresas? Está claro que no pueden permitirse los costosos sistemas informáticos de los que disponen las multinacionales, pero eso no significa que tengan que trabajar en servilletas de papel. Cada vez hay más software de gestión para autónomos que les permite trabajar sobre las grandes áreas a un coste limitado y con unas funcionalidades bastante avanzadas, especialmente en contabilidad y finanzas. Todo lo que tiene que ver con pagos y cobros suele venir integrado. Y es que es vital tener un programa para hacer facturas para llevar un buen control de tu flujo de caja y tesorería.
Muchas empresas tienen unos productos o servicios excelentes, pero fallan en lo más básico, que es llevar al día sus cuentas, y pasa lo que pasa. Muchas de ellas quiebran simplemente por no haber sido consciente de su situación financiera hasta que ha sido demasiado tarde. Por contra, otras muchas, dotadas de los correspondientes programas de gestión, han conseguido llevar su negocio al siguiente nivel, y donde empezaron con un negociete de barrio, terminan abriendo más puntos de venta en su ciudad, o incluso en otras ciudades. Hasta las hay que están operando internacionalmente. Me viene a la cabeza el caso de éxito de una hamburguesería que ha llegado a franquiciar su modelo gracias a que tenían muy buen control de sus ingresos, sus costes, sus márgenes, y un producto atractivo que consiguió convencer a muchos consumidores gracias a unos productos excelentes a un precio razonable. Y hoy en día, puedes encontrar sus hamburgueserías por toda España!
Son muchos los factores del éxito de una pequeña y mediana empresa, pero lo que es seguro es que además de tener el producto que los consumidores están demandando, y saber llegar al gran público con un precio adecuado y un emplazamiento óptimo, tampoco podemos obviar (y cada vez ocurre menos) la gestión de las redes sociales o el comercio online. ¿Qué empresa o pequeño negocio en la actualidad renuncia a poder vender por Internet? ¿Quién obvia los nuevos medios de pago, como bizum para ofrecerle al consumidor más opciones a la hora de pagar?
Con el software de gestión ocurre igual. ¿Por qué renunciar a poder llevar una gestión excelente cuando puedes tenerla por muy poco dinero? Tampoco es preciso tener perfiles especialistas en algo que un programa bien pensado es capaz de darte. La idea de este tipo de aplicativos es que resulten muy intuitivos e incluso que puedan ser escalables para que, a medida que el usuario va utilizándolo más y teniendo nuevas necesidades, puedan obtenerlas gracias a la inclusión de nuevos módulos de gestión.
En resumen, elegir un buen "compañero de viaje" para gestionar tu negocio siempre es una buena idea. Toca hacer un buen análisis de alternativas y elegir convenientemente.
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